Cuando te empecé a escuchar ya eras leyenda, ya habías acomodado las notas de la manera mas hermosa, mágica y eterna que un hombre podía hacerlo.
Fuiste el primero que me hizo pensar en la belleza, la canción, el amor, la guerra, el odio, la pasión, el miedo, la humanidad, la esperanza, y la vida como a una misma cosa.
Tus letras fueron las primeras letras del Rock que me hicieron sentir rebelde, en aquellos adolescentes años repletos de miedos y de represión interna, sembrada por aquellos que hicieron del miedo su mejor arma.
Gracias flaco!